El Colegio Marista de Las Compañías se encuentra ubicado en medio de un sector de escasos recursos en la ciudad de La Serena, donde gran parte de la comunidad vive en torno a las ferias libres que abundan en el sector. Es a partir de este contexto que nuevas ideas han traído vida a los proyectos de Ecología Integral.
El Colegio Marista de Las Compañías se encuentra ubicado en medio de un sector de escasos recursos en la ciudad de La Serena, donde gran parte de la comunidad vive en torno a las ferias libres que abundan en el sector. Es a partir de este contexto que nuevas ideas han traído vida a los proyectos de Ecología Integral.
María Belén Gálvez, educadora de educación tecnológica y artes, es parte del equipo de educadoras que se encuentra liderando las iniciativas ecológicas que el colegio lleva adelante. Ella nos cuenta que si bien inicialmente se centraron en el reciclaje de papel, esto fue generando interés en los estudiantes: “Existe un grupo de estudiantes con los que hemos estado trabajando el reciclaje de papel, que a diario es mucho el que se descarta en el colegio y partir de ellos están elaborando este papel reciclado con la intención de primero aprender lo que es proceso, porque son los chiquitos de quinto y sexto, y después en la elaboración de productos, pero esto es parte de una de las iniciativas, porque como proyecto lo que queremos realizar este año está más centrado en lo que es la economía circular”.
Sobre esta iniciativa Belén destaca: “Conversamos en esa oportunidad con los niños, si se daban cuenta que en este material ellos tenían un emprendimiento, hacer estas billeteras con los jeans, que hoy día uno de los problemas más grandes que tenemos en cierta medida a nivel medioambiental tiene que ver con la ropa, con la cantidad de ropa que desechamos, la energía que en ella se ocupa. Entonces empezamos a visualizar y a que los niños visualizaran lo que ahí tenían como producto. Muchos de los papás de nuestros niños trabajan en la feria, venden ropa, se van en la búsqueda, se les regala, la venden, entonces ellos se mueven en esto. Creímos que sería muy interesante que tomaran la opción que les brinda a la economía circular, esto de reparar, modificar y transformar. Si a eso le integramos diseño y tecnología tenemos la coordinación perfecta”.
“Si estos productos soñando se llegaran a un nivel que también sus apoderados pudieran ofrecerlos y pudiéramos generar un emprendimiento de economía circular, entonces tiene hartas posibilidades” añadió, haciendo énfasis en que esto involucraría también a las familias directamente en los proyectos de Ecología Integral.
Lo que se viene
El colegio lleva un tiempo importante conversando, tratamos de hacer proyectos, entre los distintos niveles, de esta manera los niños lo han ido asimilando entendiendo cada vez más. Se ha ido abriendo la posibilidad de entender que lo ecológico va más allá de una acción solamente, es importante la reflexión en compartir con los otros la experiencia.
